5 de diciembre de 2006

30 de noviembre de 2006

Variaciones 3

-Con "Doña Bárbara" la novela regional venezolana alcanza la cima de la perfección -con doña bárbara la novela venezolana... alcanza la perfección. Regional. Novela regional.
-Recuerden que para 1929, año de publicación de la novela, el país estaba bajo la tiranía, ya de larga data, de Juan Vicente Gómez. Por eso en "Doña Bárbara" aparecen críticas al régimen, reflejo de las ideas políticas de Gallegos, razón por la cual debe exiliarse en 1931 -recuerden... que en 19... 1927, año de publicación de la novela, el país baja de la tiranía de josé... gómez y las ideas políticas de gallegos le dan un exilio en otro año después... o algo así. Tiranía y política parecen ir siempre juntas. Con el profe Gustavo sólo se habla de gente muerta y las causas y consecuencias de cosas que alguna vez pasaron en el país, hace un pocotón de años, como en el tiempo de mi abuela. Pero con Verdugo los muertos están más muertos que nunca. Oye, ¿qué escribe en el pizarrón? Doña bárbara. Rayita. No, flechita. Novela regionalista. Modernismo. Circulito alrededor de modernismo. Raro como cae el polvo de tiza mientras escribe. ¿Así caerá la nieve? Se forman montoncitos en la bandeja, al lado y encima del borrador.
-...definitivamente se inspira en el modernismo -¿Qué? ¡Coño! Definitivamente.
-Básicamente en las novelas regionalistas se plantea el enfrentamiento de la civilización y la barbarie -básicamente en las novelas regionalistas se plantea el enfrentamiento de la civilización y la barbarie. Ajá. Los buenos contra los malos.
-Santos Luzardo es el símbolo de la civilización, las leyes, la razón y Doña Bárbara representa la barbarie, el atraso, el salvajismo avasallador de la naturaleza, la cruda selección natural darwiniana -Santos el zurdo es la ley, el bueno, pues, y doña bárbara es la salvaje naturaleza y selecciona al natural la cruda naturaleza... Verga, algo falta, pero ni loco le pregunto a Verdugo. Anota, anota, anota, luego buscas en el libro. Vuelve a caer la nieve. Santos Luzardo. Circulito. Doña Bárbara. Circulito. Civilización. Barbarie. Entendido. Las cosas no cambian. ¡Huy!, no me sé la respuesta. Mira para allá. Por favor. Para allá. Isabel TQQJ. Javier. Luis estuvo aquí. ¡Qué ociosos! Nadie responde, vamos, que alguien lo haga. Mira para otro lado. ¡Para otro lado! Aquí hay otro: La cuca de Patricia. Je je je. Pili me chupa... ¡Me salvé! ¡Pobre Adalberto! Qué rayerío tiene el pupitre. ¿Patricia será la misma Patricia? ¡Qué culito! Redondito, paradito. Un besito, un jamoncito. Un apechugoncito en las tetitas. Rico, papi, dame duro, dame más duro. Así, así. Dame hasta desarmar el pupitre. Vamos, eres lo más grande. Duro, durísimo. ¡Huy, sobre el escritorio!, rápido, más rápido. No pares, destrózame. Eres un campeón, sólo tú lo sabes hacer así.

COCLÓN.

-Ya vuelvo con usted, García. Me debe una respuesta. Vamos a agradecerle a Álvarez la inoportuna interrupción de la clase -coño, se jodió Luis. ¿Cómo se le ocurre entrarle tarde a una clase de Verdugo? Este pupitre está lleno de palabras, arrechamente más interesante que doña bárbara: lucía es una puta tqm gustavo es marico que ladilla rosa está bien buena soy un marico anita tqb verdugo cdm estoy clavao ese pana cristo viene arrecho me tire a rosa por puta gomez maricón erre con erre cigarro nunca toques a la puerta de verdugo en medio de una clase si no quieres que te joda... ¿Dónde es que iba, Patricia?

24 de noviembre de 2006

Variaciones 2

Lanzó la estopa con energía sobre el piso. El salpicón de agua llegó hasta la pared bicolor y quedó chorreando en gotas gruesas, sucias. Con la determinación habitual, casi perdida en un mar de cotidianidad, asió el mango del trapeador y untó el suelo, de izquierda a derecha, con aromas florales. El viejo reloj de agujas marcaba unos largos quince minutos pasadas las ocho de la mañana. El tiempo transcurría apacible y callado durante las horas de clase. Trató de afanarse en las esquinas, pero sólo alcanzó a arrastrar la vieja estopa como un caracol cansado, dejando una estela de humedad medio podrida en el ancho pasillo. Si se apuraba lograría terminar antes del timbre de las nueve de la mañana. Si conseguía finalizar a tiempo su trabajo, el pasillo se secaría antes de que las decenas de pies llenos de mugre comenzaran a dejar manchas en su obra de arte. Ese pensamiento le dio la suficiente fuerza para afincarse sobre el palo del trapeador y limpiar con decisión. Se detuvo de pronto pues oyó unos pasos a la carrera. A sus espaldas, por el camino húmedo, recién liberado del polvo y el mal olor, alguien venía corriendo. Ese sonido lo hizo sentir incómodo, pero trató de no levantar la vista del amasijo de fibras de la vieja estopa, y aunque le resultó una tarea extremadamente difícil lo hizo con disciplina. Los golpes de los tenis contra el suelo le treparon hasta los oídos como unos pequeños demonios atormentadores. Se volteó y miró sobre su hombro sin dejar de trapear. Era un muchacho flaquito, que venía desbocado, con los cabellos como flamas alejándose de su cabeza, hacia atrás, donde sus zapatos estaban dejando gruesas huellas de sucio sobre la estela del caracol. Agitó con furia la estopa y pasó por su mente la idea reprensible de atravesarle al muchacho en el camino el trapeador con todo y sus brazos, y sus piernas, y su cuerpo, y sus intenciones... pero se contuvo en el último minuto. El chico pasó zumbando. Saltó entre el palo y la pared. Por un momento, estando en el aire, se apoyó sobre la porción verde brillante de la pared y al instante siguiente ya doblaba la esquina utilizando los brazos como contrapeso, el morral colgando en dirección contraria. Había pasado el vendaval, así que levantó la estopa y la volvió a sumergir en el balde, removió arriba abajo aquella suciedad como si estuviera pilando maíz y luego exprimió los trapos sucios. Fue entonces cuando escuchó el episodio final de aquella carrera en un sonoro frenazo de goma que queda pegada al cemento. Si apresuraba su agenda no se habría perdido nada. Sacó la estopa chorreante y se aplicó sobre el sendero de huellas que venían desde la entrada hasta la esquina. Nunca nadie había hablado mal de su trabajo.

22 de noviembre de 2006

Variaciones 1

Zas llegué corriendo y criiiiiiiiiiiii me deslicé sobre la suela de mis zapatos de goma por el suelo de cemento pulido. Top top unos saltitos al final para frenar y no perder el equilibrio. Ya era bastante tarde para evitar dejar marcadas las suelas sobre el piso, glooooch, como chicle pegado al pupitre. Me acerqué apurado a la ventana que había en la puerta del salón. Verdugo ya había comenzado la clase de lengua y hablaba sin parar sobre Rómulo Gallegos. ¡Qué bárbaro! Mira hacia la puerta, agáchate, uno dos tres cuatro cinco a ver si ya... Ajá, es el momento, le habla a Adalberto, le pregunta y el chamo tiene las orejas coloradas. ¿Quién sabe la respuesta? Coclón, coño la puerta está cerrada y Verdugo ahora me está viendo. Sonrío comprometido tras el vidrio y le hago señas innecesarias con la mano pues ya se me acerca y no me gusta su pinta. ¿Tiene el ceño fruncido? Clac güiiiiiiiiiiiii, mierda con la dieresis, le falta aceite a esas bisagras, chirrian rechinan. Álvarez, ¿se le ofrece algo? ¿Burla? Hola, profe, tengo... Buenos días, Álvarez. Buenos días, profe. Profesor. Profesor. Hace bastante tiempo que mis buenos días ya no lo son. ¿A qué debo el placer de su interrupción? ¿Acaso me está jodiendo? Vengo a clase... Tarde. Tarde... Sí, señor. No es preferible que se hubiera quedado sentadito en el patio hasta que sonara el timbre. Este... Porque ahora ha interrumpido la clase y total usted no tiene nada que perder si falta a una clase. Verdugo. Parece que lo goza y yo bien bolsa pensando que tal vez tenía tiempo, luego pensando en que tal vez tuviera suerte, y le entraba a la clase, calladito. Siento el retumbar bun bun bun bun de mi corazón dentro del oído. Me parece escuchar murmullos, risas, conversaciones furtivas, sonidos callados de comentarios indiscretos. Güii rechina cortito la puerta cuando la empuja el brazo de Verdugo al apoyarse en ella y echárseme encima enorme grande descomunal con la cara colorada. ¡Hágame el favor de prestarme atención cuando le hablo! Lo escucho, señor. Lamentablemente usted es un caso perdido, no se quiere componer, no hay forma de que coja el camino. Yo ya tiré la toalla. Vamos, espere en el patio y no perturbe más a la clase. Sí, señ... Al diablo, no lo aguanto más, ni a él ni a doña bárbara. Coño de la madre. Coño de la madre. Coño de la madre. Coño de la madre. Coño de la madre. Coño de la madre. Coño de la madre. Coño de la madre. Coño de la madre. Coño de la madre. Coño de la madre. Coño de la madre.

1 de noviembre de 2006

Ce bolla or not ce bolla

Tengo un dilema existencial: ¿Debo remojar las cebollas antes de cortarlas en rodajas? O por el contrario, ¡mejor me pongo unos lentes de protección antes de comenzar el procedimiento?
Eso de las cebollas es uno de los desagradables placeres de la cocina... el otro es el hígado.

24 de octubre de 2006

Ciencia Ficción venezolana

Acabo de recibir una copia digital de la revista Nautilus, número cinco, de noviembre de 2005. La revista es dirigida por el escritor argentino Carlos Abraham (licenciado en letras y profesor de la Universidad Nacional de La Plata). Nautilus está dedicada a la crítica y estudio de la Ciencia Ficción hispánica, aunque también acepta artículos sobre otros géneros fantásticos como el Terror y la Fantasía. La razón de la referencia (amén de la recepción del ejemplar digital) se debe a que en ese número apareció la última versión de mi artículo sobre la historia de la Ciencia Ficción venezolana. Versiones anteriores se pueden leer en Alfa Eridiani N° 14 (2004) y en E-nigma (2005, este último traducido al portugués).
Ahorita estoy recopilando información para sacar una nueva versión (actualizada) de la historia de la CF venezolana, si alguno de los visitantes que me lee (ustedes mismos, ¡sí, señor!) tiene información sobre este género en Venezuela (literatura, cine, arte gráfico, fotografía, fandom) le agradecería que se pusiera en contacto conmigo.

10 de octubre de 2006

Necro 13

Ya está en línea el número 13 del Necronomicón (los supersticiosos pueden llamarlo 12 + 1). La edición viene con las historias de José María Tamparillas ("Amor de madre": hasta la violencia doméstica puede dejar de ser políticamente correcta), Néstor Darío Figueiras ("El fin de la soledad": no puedes saber lo que guía a un loco) y Gabriel Impaglione ("Victoriano Alcántara": nostágica revisión de una leyenda popular). Las ilustraciones que recrean uno de los relatos y el decorado de horror gótico se deben a Juan Raffo. El editorial y los comentarios a cada autor y su cuento corren por mi cuenta.
Los invito a entrar al mundo de la ficción corta fantástica de Necronomicón.
El número 13: http://necronomicon.avcff.org/necronomicon/necro13/necro13.htm.
Toda la colección: http://necronomicon.avcff.org.

24 de agosto de 2006

Una palmada de Letralia

El género fantástico en Hispanoamérica es muy activo en Internet. Existen muchísimas publicaciones electrónicas que ofrecen literatura de calidad en Ciencia Ficción, Fantasía o Terror. Desde 2003, Necronomicón aporta su granito de arena con periodicidad "semiocasional".
Este mes Letralia me ha recordado que ese esfuerzo bien vale la pena y nos obliga a no bajar la guardia y seguir construyendo castillos a punta de granitos.
Es un honor para Necronomicón (editado por la AVCFF) ser reseñado por Letralia, una publicación tan importante y con tanta tradición en las letras hispanoamericanas en Internet. Si queríamos un buen ejemplo para seguir adelante ya no tenemos excusas.
Gracias, Jorge por el empujón... y el compromiso.
Pueden leer la reseña completa en http://www.letralia.com/147/litin.htm y si desean colaborar con Necronomicón no tienen más que escribir a: necronomicon@avcff.org, poner su cuento en el texto del mensaje, o anexo, y escribir algunas líneas identificándose o simplemente saludando.
Por cierto, en septiembre viene el Necronomicón número 13...

21 de agosto de 2006

Cinco al día

CANIA, el Centro de Atención Nutricional Infantil Antímano acaba de poner en línea su primera producción audiovisual con el fin de promocionar el consumo de frutas y vegetales. El corto tiene una melodía muy pegajosa, es dinámico y muy juvenil, como el público al cual está dirigido. Así que a cambiar hábitos alimenticios...
La nota de prensa:

"El Centro de Atención Nutricional Infantil Antímano de Empresas Polar, lanza su campaña educativa "5 al día", en el marco de la iniciativa avalada por la FAO y la OMS para promover el consumo de frutas y vegetales. La cuña promocional está en la página oficial de Venezuela para esta campaña www.5aldia.com.ve, y está dirigida al público infantil y adolescente, con un mensaje al estilo hip hop".

10 de julio de 2006

7 de julio de 2006

Al fin la final

Ya está, ya la suerte está echada. Francia e Italia dirimen en una final inédita quien es el campeón. Francia dejó en la cuneta a unos portugueses que se entretuvieron con la pelota lejos de donde podían hacer historia e Italia fulminó a Alemania en dos minutos finales para el recuerdo.
El sábado, los perdedores tratarán de paliar el amargor en una final chiquita e intrascendente. El domingo, los ganadores se jugarán el todo por el todo, se lanzarán por el oro de la corona. Francia tiene nuevamente la gloria a escasos centímetros, casi rozada por la punta de los dedos, ¿podrá Italia arrebatarle un inolvidable retiro a Zidane?
Espero que sea una final emocionante... al menos ambos equipos se han batido en este torneo para eso, no espero menos.

4 de julio de 2006

¡Adiós, Brasil!

Desde el punto de vista positivo: nos salvamos del hexacampeonato. Lo negativo fue para Brasil, la derrota en un juego mal jugado de un equipo que jamás pudo encontrar una mejor forma de golpear la pelota... mejor dicho: jamás encontró la pelota. Brasil fue un espejismo de grandes nombres que en la hora decisiva se disolvió.
Lo de Zidane fue antológico, jugó como pocos y me recordó la actuación del maltrecho Maradona en el partido contra Inglaterra en 1986. Uno de esos instantes de fútbol que han quedado grabados en mi memoria, aunque supongo que tampoco se le olvidará al equipo brasileño.
Ya están cuadrados los juegos de semifinal y el instinto apunta a Alemania y Francia. Si no se atraviesa alguna circunstancia caprichosa Francia podía quedarse con el título, pero aún tiene que ganar dos juegos. Mañana contra Portugal (que tendrá la plantilla completa) y el domingo ante Alemania. Italia desde el otro lado de la llave puede torcer prematuramente el destino de Alemania. Sin embargo, confiemos en el sentido común y aguardemos el partido final.
Ya el jueves las brumas de la final se habrán disipado.

30 de junio de 2006

Cuatro, dos, uno (Fin de la trilogía del cuatro)

Dentro de pocas horas darán inicio los cuartos de final del mundial de fútbol con el partido Alemania - Argentina... no apto para corazones débiles (sobre todo si se es un corazón argentino o alemán).
Pero mi mente está un poco alejada de ese futuro, lo que realmente deseo hacer ahora es solicitar un minuto de silencio por la selección española. Es increíble cómo quedaron fuera del mundial, y lo más increíble fue porque jugaron requetemal. La España que me había impresionado en la ronda eliminatoria parece que fue en franco declive a medida que transcurría el mundial, frente a Francia tocó fondo. ¿Será una limitación autoimpuesta por los mismos jugadores, una confabulación conspirativa de los "grandes poderes" o la alineación de las esferas cósmicas simplemente le dio la espalda a España?
Lo cierto es que la historia se repite y se repite mundial tras mundial, España se desinfla a medida que la exigencia es mayor, cuando se necesita un redoble de esfuerzos y no una división de posibilidades. Paz a sus restos.
Ya el mundial entró en la espiral final que lo acabará: cuartos, semifinales y final... luego a esperar otros cuatro años. El único gran juego de esta instancia parece ser el de Alemania contra Argentina por lo que han demostrado en el mundial ambos contendientes. Los otros juegos no parecen tener tantos kilates en la vitrina.
Francia está en muy baja forma, frente a un Brasil que parece mejorar. Italia, que no ha convencido, se ve mejor que Ucrania. Portugal, aún diezmado, luce superior al juego inglés. Por último en el gran juego de esta fase, Alemania tiene ligeras posibilidades sobre Argentina, pero sólo ligeras, muy ligeras...
Como siempre, todo lo que he dicho puede estar destinado al desatino, pero para eso se ha hecho el fútbol.

26 de junio de 2006

¡Cuatro adentro!

Alemania pasó a cuartos de final en un paseo. Argentina sufrió ante un bien plantado México. Inglaterra ganó sin mostrar nada a un Ecuador sin ambiciones. Portugal ganó en un juego donde todo parecía valer.
No me puedo explicar cómo Ecuador aceptó su destino así, fatalista, con los brazos caídos, ante un equipo inglés que jugó flojo, sin tino. La gloria es de quienes se afanan en buscarla. Tanto camino el transitado por los ecuatorianos, para llegados a la hora final morir boqueando en la orilla.
Ya todo es historia pasada, los cuatro ganadores están adentro, sólo faltan los cuatro juegos de los ocho restantes para definir los cuartos de final.

20 de junio de 2006

El grupo del 4

El grupo H del mundial de Fútbol hasta el momento registra la curiosidad numérica de que sus primeros cuatro partidos terminaron con la anotación de cuatro goles: España 4 Ucrania 0, Túnez 2 Arabia Saudita 2, Ucrania 4 Arabia Saudita 0 y España 3 Túnez 1; 16 goles en total, siendo además el grupo donde más goles se han marcado hasta el momento.
Hasta ayer los equipos que habían mostrado mayor contundencia eran Argentina, Alemania y España.

16 de junio de 2006

¿El milagro es Ecuador?

Como era de esperarse no se produjo el milagro para Polonia. Lo peor es que los deseos murieron con el primer milagro de los tres necesarios: Ecuador fulminó a Costa Rica y de un plumazo dejó afuera a Polonia y a los mismos ticos. Lo de Ecuador puede ser una promesa, una realidad o un espejismo. Aún es posible hacer las apuestas. Ha jugado muy bien, en orden, seguro atrás y efectivo adelante. Sin embargo, sus rivales no han sido oponentes demasiado exigentes. Aunque ha aprobado con sobresaliente ambos compromisos, sobre todo el segundo, aún falta verlos contra un equipo que los presione y les saque el juguito. Alemania debe ser el calibrador de la verdadera fortaleza de Ecuador o nos mostrará un supuesto gigante con pies de barro.
Al margen, o en el centro de la tragedia, según se mire, está la partida sin pena ni gloria de tres selecciones del mundial: Polonia, Costa Rica y Paraguay. Trinidad y Tobago está guindando y no es precisamente un mango.
Hoy la jornada puede sellar el destino de otros equipos, algo nada extraño en un campeonato mundial. Angola se antoja la próxima víctima. Me abstengo de opinar sobre el grupo C, demasiado cerrado... si la lógica se impone deberían salir gananciosos Argentina y Holanda, pero el fútbol a veces le gusta llevar la contraria.

15 de junio de 2006

¡Pobre Polonia!

Polonia está al borde del abismo. Atrás quedaron las glorias del 74 y el 82, cuando obtuvieron dos terceros lugares. La debacle comenzó con la buena fortuna de Ecuador y la mala marcación y los dos postes que sepultaron a Polonia en el primer partido. Contra Alemania, Polonia sólo se defendió... y perdió en el último minuto. Ahorita Polonia depende de un milagro en tres actos (algunos de esos milagros son más probables que otros y uno de esos milagros depende de ellos mismos). Milagro número uno: Costa Rica le debe ganar a Ecuador, milagro número dos: Alemania le debe ganar a Ecuador, milagro número tres: Polonia le debe ganar a Costa Rica y de paso asegurar una mejor diferencia de goles que Ecuador y Costa Rica. La tarea parece casi imposible para un equipo que no ha marcado goles y que de ñapa le han hecho goles hasta de saque lateral. Creo que Polonia es la primera víctima del mundial, ¡qué triste!.
Punto aparte, ya todas las selecciones se han presentado en una ocasión y casi todas son un desastre (Brasil incluido). Las mejores primeras impresiones se deben conceder a Alemania y a España (aunque no pude ver el partido de esta última, al menos hizo cuatro goles y algo bueno puede esconderse allí).
El arbitraje todavía no ha ingresado en el lado oscuro que transitó en el 2002 y confío en que se mantenga así, pero los equipos parecen estar tentados por una mediocridad que enfría los ánimos.
Sí, así es... mi hija no quiere que le recuerden esos últimos seis minutos del partido Australia-Japón.

12 de junio de 2006

Terrible comienzo de mundial

A excepción del primer partido, que se sobró en emoción y goles, los siete partidos restantes del fin de semana fueron un desastre. Sólo se salvó el primer tiempo de Holanda contra Serbia y Montenegro.
Sólo puedo pensar benévolamente en que es el primer partido y los equipos aún no se han acoplado (ignorando el hecho de que el Mundial tiene un largo camino recorrido que no comenzó el 9 de junio). Ya jugó la mitad de los equipos participantes y el panorama es bien sombrío. Alemania mostró goles pero dejó la retaguardia muy desvalida.
Los demás equipos ni siquiera tuvieron el beneficio de los goles y en cambio mostraron un pobre nivel de juego. Totalmente tetanizados en su juego, los equipos "fuertes" deambularon por las diferentes canchas corriendo tras la pelota sin otra idea mejor para perder el tiempo.
Argentina, Inglaterra y Portugal brillaron tal vez 20, 15 y 5 minutos respectivamente. La próxima vez esperaré a ver el resumen para ahorrarme tanta ineptitud. Quiero ser optimista y ver en los escasos minutos de buen juego una promesa de mejores partidos en el futuro... la experiencia del pasado me grita que estoy muy equivocado porque las redenciones son escasas, pero son las excepciones las que hacen al fútbol tan especial.
Correrá el mundial y este se decantará por la mediocridad del de Japón-Corea o intentará reverdecer el juego bonito de otras eras. Por lo pronto hoy estrena Italia y República Checa, ya Japón está ganando 1 - 0, por lo que mi hija, otaku de anime a rabiar, debe estar feliz.

9 de junio de 2006

¡Hasta Google!

Hoy empieza el mundial. Se acabó cualquier tipo de vida ajena a ese deporte. Durante todo un largo mes hablaremos, comeremos y respiraremos fútbol. Todos seremos directores técnicos y agonizaremos hasta la angustia total siguiendo las peripecias de nuestros equipos. Nos olvidaremos de la realidad y tomaremos unas merecidas vacaciones.
Por mi parte ya publiqué una proclama de inamovilidad telespectadora y mi esposa la pegó en la puerta de la nevera. Hoy empieza el mundial y hasta Google le dedicó el logotipo especial del día. Estoy feliz, no es lo mismo que antes, pero es suficiente.

7 de junio de 2006

En ocasión de un 666

Ayer fue un día que recordará todo el mundo por cosas que no iban a pasar pero que a más de uno le quitaron el sueño. Es increíble cómo la gente se deja impresionar con unos numeritos ordenados por convención en una manera determinada. A pesar de toda la racionalidad que la ciencia intenta infructuosamente sembrar en la mente humana, el Homo sapiens parece atraído fatalmente al oscurantismo. El poder del misterio ejerce una seducción imposible de resistir. Así fue como de una forma u otra todos se aprovecharon de hacer tema de conversación los tres seis en fila india, unos en serio y otros no tanto.
Por eso ayer salió casualmente el Necronomicón 12 y también Axxón publicó 82 ficciones apocalípticas ultracortas. Seis de éstas me corresponde asumirlas como autor, están invitados, no hay desperdicio.

6 de junio de 2006

Necronomicón doce

Casualidad forzada en los últimos segundos. Casualidad de conseguir que un día curioso, por una extraña asociación cultural y de secuencias de números, coincidiera con la edición del duodécimo volumen de la revista innominable.
Pueden ir a disfrutar tres historias de terror en el número de junio del Necronomicón.
Apunten a http://necronomicon.avcff.org/necronomicon/necro12/necro12.htm y que la pasen de miedo.

31 de mayo de 2006

Generaciones

Lucius Dimas cavó con sus propias manos en la tierra seca. Arañó la rústica superficie cubierta de piedras, compacto caparazón de lajas astilladas, sin hacerle caso al dolor punzante, ni a los colgajos de piel en sus dedos. Cavó incansable durante años incontables, hasta que descubrió el rostro de su padre. Con un esfuerzo final retiró el material que lo cubría desde hacía tanto tiempo y se derrumbó en un rincón del foso.
Jerónimo Dimas abrió los ojos y se dio la vuelta, se puso sobre sus rodillas, ignoró el cuerpo inerte de su hijo y comenzó a cavar. Utilizó sus dedos como arado y abrió surcos cada vez más profundos en el lecho de aquel agujero. No reparó en los días y las noches que se sucedían interminables a su alrededor. Cavó hasta que su carne no fue más que un pedazo de materia inanimada y sus brazos crispados se agitaban sin control. Su útimo aliento se difundió trémulo, pero apremiante, en cinco centímetros de suelo y estremeció un pensamiento postrero de su padre: Zacarías, abuelo de Lucius, y lo trajo a la conciencia y a la sensación perentoria de una tarea por cumplir.
Zacarías apartó el cuerpo de su hijo y empezó a cavar con frenesí. Al final de un tiempo indefinido desenterró a Jonás; eventualmente éste a su vez a Eneas y luego éste a Tomás... Secuencia inversa casi infinita de hijo a padre, de padre a abuelo, de abuelo a bisabuelo... hasta el origen de la genealogía. Excavando con las manos sangrantes en aquella tierra inhóspita hasta completar el ciclo, una y otra vez.
Solitaria tarea la de los condenados en la antigua meseta de Leng.

24 de mayo de 2006

Oro en el Klondike

Todos los años llega este día y generalmente me viene a la memoria Rico Mac Pato, quien siempre que tenía la oportunidad y había auditorio, echaba el cuento de cómo consiguió la primera pepita de oro en el Klondike. No son exageraciones mías, tengo a Donald y a Hugo, Paco y Luis como testigos.
Quizás son chocheras que vienen con la edad, pero cada año, el 24 de mayo, al arrancar la hoja del calendario (o tachar el númerito en el cartoncito del mes) recuerdo que hace tantos años un grupo de locos se puso de acuerdo y formó un club que por milagros de la entropía ha trascendido al nuevo siglo.
Pensándolo bien, debo ser un optimista incurable (y no lo digo por la situación del país, que parece endémica) al soñar todos los 24 de mayo que UBIK va a perdurar otro año más. Además debo ser optimista patológico al permitirme tal liberalidad de arrancar la hoja del calendario de un día que aún no ha trascurrido. ¡Dígame la barbarie de tachar el número, cuando no sabemos si los marcianos van a llegar antes de mediodía en sus artilugios luminosos y reducir a la humanidad a polvo de estrellas!
Pero no creo que muchos de nosotros nos detengamos a maquinar tan funestos pensamientos, aunque a pesar de ello, pocos nos atrevemos a arrancar la hoja del calendario antes de que finalice el día. A lo mejor un Alzheimer infinitesimal, latente, nos obliga a conservar ese recuerdo del día, para que a la mañana siguiente recapitulemos sobre las vivencias del día anterior mientras tiramos sus restos a la papelera.
Así es que, marcianos o no, todos los años el 24 de mayo me pongo a rememorar como Mac Pato acerca de mi pepita de oro en el Klondike. Hace 22 años creamos el club de Ciencia Ficción de la Universidad Simón Bolívar; UBIK para más señas. Fue un jueves neblinoso por la tarde. Afuera las nubes se colaban veloces entre los pinos. Adentro, tras las ventanas del edificio de Básico II (actualmente Ciencias Básicas II), discutíamos ante un pizarrón manchado de tiza cuál sería el nombre de la asociación. Al terminar la reunión teníamos nombre: UBIK, en honor a Philip K. Dick. Asimov quedó finalista y fue una fortuna.
Tal vez sea lo que hay de obsesivo en mi personalidad, pero siempre termino machacando esos recuerdos, igualito que Rico Mac Pato y su anécdota.
Tal vez sea obsesivo, pero mi hija mayor también nació un 24 de mayo.
Sólo me falta encontrar pepitas de oro en el Klondike.

11 de mayo de 2006

Gantz: sexo y violencia

Gantz es el nombre de una serie de anime de 26 capítulos que recientemente transmitió el canal de cable Animax. Sin el apoyo de la lectura del manga original en el que se basó el anime, les resumo de qué trata la serie japonesa: Gantz es un ente (vaya a saberse su origen, en el anime no se aclara) que dirige a un grupo de personas en misiones con objetivos definidos.
Hay varias peculiaridades que distinguen lo que parece un cuento simplón: Las personas participantes en el "juego" de Gantz ya han muerto y el cumplimiento de los objetivos de la misión es vital para no volver a morir.
La historia del anime se centra en tres personajes (dos muchachos y una muchacha), como es costumbre en el cómic japonés los personajes principales son tan jóvenes como es posible, todos casi preadolescentes. Los dos muchachos mueren en la línea del metro intentando salvar a un mendigo, la muchahcha es víctima de un suicidio. La forma de morir no es lo importante, lo necesario es estar muerto en el momento justo. Entonces Gantz, por quién sabe qué medios, te transporta hasta una habitación donde asigna las misiones.
Matar, matar y después destruir, pero sin olvidarse de matar, es el objetivo último de estas misiones. Matar seres extraños, estrafalarios... denominados alienígenas en la serie, pero que pueden ser cualquier cosa dentro del universo de la fantasía.
Con un objetivo tan claro, la violencia viene sola. La tasa de mortalidad de los participantes en las misiones es elevada. Pocos sobreviven, la mayoría termina por sucumbir por segunda vez en los escasos sesenta minutos que dura una misión. Toda una variopinta colección de lesiones es causada por las armas que Gantz pone a la disposición de las personas resucitadas. Desmembramientos, implosiones, explosiones, sangre y órganos desparramados por doquier es la nota predominante.
Sin embargo, si sólo fuera violencia, una matadera sin razón, el anime poco interés me hubiera ofrecido (a menos que piensen que mi morbo es un tanto enfermizo... y no los culparía de pensar tan mal de mí), pero Gantz es una intriga constante sobre las razones para tal "juego", de las motivaciones del "maestro del juego" para organizar tales eventos de circo romano.
Tampoco se queda allí la serie. Están los conflictos de los personajes principales y sus tragedias, y las desgracias más pequeñitas que aquejan a los personajes secundarios. Por ejemplo, Kurono Rei, uno de los protagonistas, es un adolescente que tiene hormonas y feromonas hasta debajo de la pituitaria. Sus fantasías sexuales matizan su percepción del juego de Gantz, y terminan por contaminar el enfoque y la estética de la serie. Literalmente.
Gantz no es apta para menores de edad, aunque quizás ya sea innecesario decirlo.
La serie desarrolla cuatro misiones (muchas menos que el manga) y termina abruptamente en el capítulo 26 con un final poco menos que incomprensible... cualquier idea que se nos ocurra puede satisfacer nuestras dudas ante ese desenlace, pero seguramente tal respuesta lo único que logrará es generar más preguntas. Según los otakus el manga es más benigno con el lector...
Véanlo prevenidos.

2 de mayo de 2006

Scifipedia

El canal de ciencia ficción por cable SciFi Channel acaba de poner en línea una enciclopedia de CF en inglés: Scifipedia. El sitio está apenas dando sus primeros pasitos y no tiene mucho contenido (apenas poco más de 1000 artículos). También está en minusvalía con la Wikipedia por la cantidad de información que contienen los artículos de ésta en comparación con la magra información que ofrece la Scifipedia. Por ejemplo, la entrada a la película "Galaxy Quest" que la Scifipedia promociona en la sección "Did you know?" del día de hoy, es mucho más detallada en la Wikipedia que en la Scifipedia, como pueden confirmar siguiendo los enlaces.
La Scifipedia tiene algunas ventajas relativas: está especializada en el tema de la CF y ofrece información que no se halla en la Wikipedia, como el dato que los creadores de la película "Galaxy Quest" asistieron al acto de entrega del premio Hugo que esa película ganó en el año 2000. Bueno, por eso digo, las ventajas son relativas...
Para nosotros, los que hablamos español, tenemos la Wikipedia en español y la Enciclopedia de Fantasía y Ciencia Ficción de Golwen, fundada por Martín Cagliani.

27 de abril de 2006

El Hombre Par

El hombre Par es uno de esos recuerdos agradables de la infancia que con el tiempo se hacen cada vez más placenteros y se agrandan hasta parecer cubrir todo el horario de nuestras actividades cuando niños. Era un anime de cuando llamábamos al anime comiquita y no se le prestaba atención a las categorías.
En ese entonces me fascinaba el objeto que Mitsuo, el protagonista, guardaba en el closet. Era toda una nota tener un substituto que realizara esas tareas molestas que a ningún niño le gusta: estudiar, asistir a la escuela (que no debemos confundir con lo primero) y ordenar el cuarto... ¡Listo!, con sólo apretar el botoncito que tenía por nariz el muñeco del closet se convertía en tu copia, fiel y exacta. Luego te podías dedicar a los juegos, mientras tu robot se encargaba del trabajo sucio.
Lo curioso es que a pesar de que ya no soy un niño (aunque mi esposa no piensa igual esa es otra historia) aún estoy deseando conseguirme un robot que se encargue de todas las faenas enojosas que afligen al ser humano. Quiero un robot al que se le pueda apretar la nariz para motivar el mágico cambio: un robot que se parezca a mí y respete las tres leyes de la robótica.
Llegó la hora del recreo.

21 de abril de 2006

Nuestros propios campos de petróleo

Necesitamos patriotas con vocación irracional por la incineración y que sean capaces de responder afirmativamente a las siguientes preguntas:

1. ¿Le sudan las manos, los ojos se le ponen puyúos y el corazón se le desboca cuando ve un fósforo encendido?
2. ¿Su héroe histórico es Nerón?
3. ¿Siempre es el primero en ofrecerse para encender los carbones de la parrilla?
4. ¿De niño le encantaba el cuento de aquel chamo que saltaba y saltaba encima de una vela? y ¿se moría por escuchar una y otra vez la escena donde el lobo caía en el fuego de la chimenea?
5. ¿Usted se muere por las recetas en las que se tenga que flamear el plato?
6. ¿Le fascinan las películas con escenas de persecución con muchas explosiones y que siempre terminan con un carro en llamas?
7. ¿A usted le gustaría que le cantaran el cumpleaños todos los días? ¿Y mientras más años, mejor? ¿O que le contaran las semanas en lugar de los años?
8. ¿Le gusta la comida quemada?
9. ¿Su único dios es una nube piroclástica?
10. ¿Cuándo ve las estrellas sólo piensa en enormes llamaradas?

Prometemos que cuando hayan cumplido con la nación, esparciremos lo que quede de sus cenizas en lo que quede de nuestra patria. Amén.

20 de abril de 2006

18 de abril de 2006

Los errores de Stephen King

Tommyknockers es una novela de Ciencia Ficción. De todas las novelas de Stephen King que he leído, es indudable que ésta se puede definir dentro del género sin ningún esfuerzo.
En Mientras escribo, Stephen King aboga por la concisión. Trata de vendernos a los lectores, aprendices en el gremio de escritores, las bondades de la economía de las palabras. Obviamente, Stephen King ignora con reiterada premeditación sus propios consejos, a lo mejor alguna directriz primordial, desconocida para el resto de los mortales, priva sobre sus decisiones a la hora de arremeter sobre resmas de papel en blanco. Lo cierto es que en la literatura de King abundan los volúmenes gruesos y Tommyknockers no es una excepción.
Cuando se escribe mucho se corren más riesgos de meter la pata. A menos que se demuestre lo contrario, Stephen King sangra cuando se afeita, ergo es susceptible de dejar huellas palpables de su condición humana. Sin embargo, en el universo de las meteduras de pata hay de todo. Desde los errores indefendibles, casos feos, hediondos e imposibles de justificar en un foro, entrevista o cita íntima, hasta los sinuosos y escurridizos que permiten el ejercicio del derecho a pataleo. Este último caso es el que alberga el reino de las opiniones, donde todos tienen la razón y todos están equivocados.
Si no caemos presas de la histeria, podemos dividir los errores del autor en su obra en sólo dos tipos (olvidándonos de los matices y los claroscuros): por un lado los errores objetivos incuestionables (incongruencias en hechos, cifras, cantidades o fechas) y los errores subjetivos, motivo de disputas irreconciliables entre los lectores.
¡Qué pajerío loco, ya pensará más de uno!, y tienen razón. Me he tomado la libertad de definir un criterio de clasificación de errores de escritor que seguramente ya existe en una forma académica y mil veces más preciso, lo he hecho para poder presentar en dos partes la gran tortilla que puso Stephen King en una obra que a pesar de todo me gustó bastante, aunque en el balance general haya quedado out en el plato. La primera sección comienza así:

Sobre los errores objetivos incuestionables.
Hay dos de estos errorcillos en Tommyknockers y me sorprende. No me sorprende porque sean pocos, sino porque son muchos. Me sorprende porque son fáciles de detectar. Si leemos uno y treinta o cien páginas más adelante el autor sin previo aviso nos clava un dos en medio de los ojos, tenemos al frente, literalmente, un problema, es un error y debemos comprobar cuál de las dos es la cifra correcta, algo que no debería ser muy complicado pues sólo requiere atención mientras se lee.
La situación es doblemente sorprendente porque según King sus manuscritos pasan por un ejército de lectores amigos antes de salir publicados y también porque supongo que la editorial tendrá a otro ejército de revisores, correctores, zapateros e ingenieros para expurgar hasta el último pecado que se haya colado entre las letras. No obstante, así como Stephen King es el abogado de la brevedad y se pasa de maraca, también es defensor de la pulcritud y exactitud de la historia, pero parece que a veces deja los manuscritos abandonados en una plaza llena de palomas.
Tommyknockers es una novela de Ciencia Ficción, ya eso lo había dicho, lo sé, y la primera prueba de ello es que hay un platillo volador. Toda la novela gira alrededor del bendito platillo (aunque debería ser al revés si recordamos al Júpiter 2). La acción se desarrolla en Haven, un pequeño pueblo rural del este de Estados Unidos. El platillo está enterrado en el pueblito desde épocas inmemoriales, casi lovecraftianas. El artefacto extraterreste es descubierto accidentalmente y su desenterramiento a lo largo de la larga larga larga larga novela induce cambios físicos y mentales en los pobladores de Haven. Los cambios mentales no interesan en este momento, pero los físicos sí, e involucran la pérdida de la dentadura. No uno, ni dos dientes, sino todos y cada uno de los dientes de las personas afectadas por la influencia del objeto extraterrestre. El resultado final de los cambios físicos no es una sonrisa pepsodent, sino todo lo contrario. Aquí es donde se desliza el primer error indefendible de King.
La protagonista, Bobbi Anderson, ya bien avanzada la trama, y bien avanzada la senda sin retorno de la transformación, ha perdido sus dientes y Stephen King se asegura en múltiples escenas y ángulos de que lo notemos. Sin embargo, en un pasaje posterior leemos con incredulidad Bobbi le sonríe a su antagonista... y su sonrisa está más repleta de dientes que la de un tiburón. Dientes surgidos, sin lugar a dudas, del subconsciente de King, de la convención de normalidad que su ficción siempre busca subvertir... bueno, de eso vive, ¿no?
Claro que soy un obsesivo sin remedio. Es obvio que el caso es un detalle insignificante y también es evidente que Stephen King es humano, pero aún así ese detalle se asemeja demasiado a los errores de producción de algunas películas, cuando aparecen o desaparecen por arte de magia los objetos de una habitación o la camisa del actor cambia de color, de estilo o de estado físico.
Si el error anterior es nimio y me señala como un caso clínico de perturbación mental, el otro desliz de King no es tan vaporoso. Es muy probable que a Stephen King se le hayan subido las letras a la cabeza. El caso fue el siguiente y se refiere a relaciones temporales entre algunos de los tantos personajes secundarios (pues Tommyknockers está repleta de personajes, casi toda la guía telefónica de Haven, en una estructura muy similar a Apocalipsis, otra de sus novelas mamotréticas). Ruth McCausland es una mujer policía que no puede tener hijos y está casada con un policía de nombre Ralph. Debido a su incapacidad para concebir decide rodearse de muñecas y así arma una colección de muñecos de distintas partes del mundo. Ruth y Ralph se habían casado en 1959 y la dicha conyugal se había prolongado en la misma medida en que aumentaba su colección de muñecos, pero todo termina abruptamente en 1973 con la muerte de Ralph. Quizás King no prestó mucha atención a la fecha, total lo importante era la muerte de Ralph y ya estaba perpetrada, el año en que murió era lo de menos. La anacronía se forja gracias a la existencia de otro personaje, un niño (en forma recurrente las historias de King difícilmente pueden obviar la tragedia infantil): Hillman Brown. Debido a que Hilly era un tantín hiperactivo, su infancia estuvo plagada de pequeños desastres. A los cinco años casi muere arrollado por un camión, una repetición de la escena de Cementerio de animales (para que no digan de King que no se repite o que tiene una imaginación inagotable), pero como ya dije no muere, sólo parece que va a perecer. Tan espeluznante es el suceso que su madre, que lo presenció todo, le comenta luego a su esposo que en el momento del accidente había visto hasta la lápida de su hijo: "Hillman Richard Brown, 1978 - 1983, se fue demasiado pronto". Como si fuera necesario, el propio King no quiere dejarnos un resquicio para la duda o para la torpeza en una operación matemática, fija sin ambigüedades el año del nacimiento de Hilly Brown.
El circuito se cierra, o mejor dicho hace corto circuito, mucho mas adelante en la novela cuando el marido de Ruth McCausland rememora el pánico que Hilly Brown sentía por los muñecos de Ruth. ¿Que qué? Me lo repiten por favor... ¿Cómo podía Ralph haber presenciado el miedo de Hilly si había muerto cinco años antes del nacimiento del niño? Para completar el peluquín, en la escena había sido voluntad del pequeño Hilly el no acercarse a los muñecos, lo que implica que el niño podía moverse por sus propios medios (en otras palabras no era un bebecito), lo que aumenta el rango de discordancia temporal.
Esa es la historia de los dos errores inobjetables que detecté en Tommyknockers, sobre las otras apreciaciones que mal pueden llamarse errores sin caerse a trompadas intelectuales, buscaré otra ocasión más propicia.

17 de abril de 2006

Sabiduría popular

En la expectante cuenta regresiva para el mundial de Alemania me llegó esta especie por correo electrónico. Por lo pronto, ni corto ni perezoso, ya cumplí con reenviárselo a mi esposa... guerra avisada no mata soldado.

Para mi Esposa:

1.- Del 9 de Junio al 9 de Julio, lee la sección deportiva del Mundial para que tengas tema de conversación; sino lo haces no te extrañes de que no te hable.

2.- Durante el Mundial la tele es mía, a todas horas, sin excepción. El control. ni lo mires.

3.- Si tienes que pasar frente a la tele durante un partido no me importa, siempre y cuando pases gateando y sin distraerme.

4.- Durante los partidos estoy sordo y ciego. No esperes que te oiga, que abra la puerta, conteste el teléfono, lleve a los chamos al colegio o te ayude en algún trabajo. Nada.

5.- Sería bueno que siempre tengas cervezas en la nevera, en abundancia y le sonrías a mis panas que llegan a ver el fútbol. En agradecimiento, te dejaré ver tele de la media noche a las 6 de la mañana.

6.- Por favor, si me ves molesto porque mi equipo va perdiendo no me digas "no es para tanto" o "en el siguiente seguro ganan"; harás que me moleste más.

7.- Puedes sentarte a ver un partido conmigo y puedes platicarme en el medio tiempo y sólo si hay comerciales. Tampoco abuses, dije UN partido.

8.- Las repeticiones de los goles son muy importantes. No importa si ya las vi o no las he visto, las quiero ver de nuevo, muchas veces.

9.- Que no se le ocurra a ninguna de tus amigotas bautizar al niño o hacer una Primera Comunión un sábado de partido del Mundial porque:
a) No iré.
b) No iré y
c) No iré

10.- Pero si un amigo nos invita un domingo a ver el fútbol ¡Qué gran invitación!, iremos sin dudarlo.

11.- Los resúmenes de la jornada Mundialista durante la noche son tan importantes como los juegos mismos; no se te ocurra decir "pero si eso ya lo viste. ¿porque no cambias?".

12.- Finalmente, ahórrate expresiones como ¡qué bueno que el Mundial es cada 4 años...! estoy inmunizado contra palabras necias. Porque además luego viene la Champions, Copa América, la Liguilla, Liga Española, Italiana, etc.


¡LÉASE Y CÚMPLASE!

15 de abril de 2006

El fin del verbo

En el final de la era de los hombres el último verbo dejaba de serlo. Hacía mucho yacía solitario y poco a poco olvidaba su esencia, pasando a ser sólo un significado plano sin pasado ni futuro. Sin ser, ni estar, sólo cualidad en una dimensión de cosas muertas, sin tiempo. No había nadie presente cuando transmutó, pues hacía eones que las obras de los hombres eran polvo y roca informe. Fue el fin del verbo y el comienzo de la persistencia de las cosas, sin tiempo, ni principio ni final.

14 de abril de 2006

Siete pequeñas tragedias cotidianas

Accidentes que nos hacen vivir plenamente nuestra realidad corporal:

1. Levantarse una uña del pie con un tropezón.
2. Quemarse los dedos tocando una olla caliente.
3. Escocerse los ojos con una gota extraviada al exprimir un limón.
4. Machucarse los dedos con un martillo al clavar un clavo.
5. Pillarse un pliegue de piel con un alicate.
6. Cortarse con el borde de una hoja.
7. Pincharse con una aguja de coser.

13 de abril de 2006

¡Onidex mesma!

Ayer los dos Jorges de la casa se sacaron pasaporte: Jorge el no tan viejo (o el no tan joven, dependiendo del punto de vista) y Jorge el joven (Jorge III según la cronología de la casa de los De Abreu). Lo de la solicitud por internet fue un trámite sencillo; sin embargo, me era imposible dejar de sentir desasosiego por lo que podría ocurrir en la otra realidad.
La cita quedó para ayer miércoles 12 de abril a las 10 de la mañana en Los Ruices. Jorge, el no tan viejo, se presentó, con desasosiego y todo, a eso de las nueve de la mañana en la oficina de la Onidex; el Jorge el joven aún dormía el sueño de los justos. Su condición de inocente infante le servía de excusa. Afortunado él por ser menor de edad y exento de las minucias intrascendentes que ocupan a la gente mayor.
Maravilla de maravillas que asombraron los ojos ancianos del jorge no tan viejo. El proceso fue expedito, los funcionarios amables y la alegría mayúscula de este servidor cuando me encontraba de regreso a casa una hora y media más tarde.
Ya en el auto me pellizqué innumerables veces para asegurarme que no estaba soñando. aparentemente no había sueño de por medio porque pegaba un brinco ante cada pellizco, hasta le eché un parado a mi esposa que también se había entusiasmando con lo de la pellizcadera. Ahora la cita es para dentro de un mes para recoger los benditos libritos.
Espero que las segundas partes sean mejores...

4 de abril de 2006

Solaris

Respondiendo a Milan...
Solaris... Nunca me he topado con ella en un anaquel, ni en librería de precios escandalosos, ni en mesón lleno de bacterias. La fama la precede, pero la imposibilidad de verla en papel la ha dejado para el rumor.
Aunque no he leído Solaris, he tenido la oportunidad de ver las dos adaptaciones fílmicas del libro y creo que deben ser un pobre indicador de su calidad, porque ambas películas no me han gustado. Si por el contrario, las películas son fiel reflejo de la novela de Stanislaw Lem, entonces no me he perdido de mucho.
La primera Solaris, la soviética de Tarkovsky, me pareció espantosamente larga, exageradamente lenta y totalmente aburrida. La escena que recuerdo más, pues tal parece que se quedó engarzada en una sinapsis, para mi desgracia, y que se ha negado en abandonar mi memoria, es aquella del viaje en carro por la megalópolis. Minutos, tras minutos, tras minutos, de autopistas, túneles, ciudad, concreto... minuto tras minuto. Mi memoria, debe estar jugándome una mala pasada porque mientras más lo recuerdo, más larga me parece la escena. A veces me despierto en medio de la noche, sudando y con los ojos desorbitados. Tratando de salir del túnel interminable. Escuchando los bocinazos amplificados entre las paredes curvas. ¡Es una pesadilla!, suelo decir para tranquilizarme, pero me inquieta el olor a gases vehiculares. ¡Combustión interna!, grita otra neurona casi muerta de anoxia. Menos mal que el episodio no se produce todas las noches y que cuando sucede estoy pronto a despertarme. Lo malo es que cuando me siento al volante me vienen esas imágenes de inmensas autopistas sin final y casi convulsiono.
La otra versión, la de Soderbergh la vi hace poco, lo que tenía de lenta la de Tarkovsky, ésta lo tiene de melodramática, con el tocayo Clooney derramando lagrimones. Al menos es corta y el sufrimiento es breve...
No creo que ninguna de las dos películas refleje las ideas de Lem en la novela original; sin embargo, Solaris aún espera por la lectura y mientras tanto el único recuerdo es una larga vía sin final...

28 de marzo de 2006

Stanislaw Lem (1921 – 2006)

Otro que se ha ido.
Aunque no es exactamente otro de la misma camada, pues a Lem no le hubiera agradado quedar en el mismo saco que muchos de los escritores de la CF anglosajona y creo que con mucha razón.
Sin embargo, me es imposible no ver con nostalgia como poco a poco la condición material de la humanidad hace mella en los clásicos del género. Viéndolo por encima quedan pocos de aquellos dinosaurios majestuosos: Bradbury, Clarke... Muy pocos, cada vez menos.
Lem se ha ido, supongo que se cansó de esta realidad. Se cansó de tanta humanidad estúpida y se mudó a otra realidad.
Recuerdo al Lem del alucinante Congreso de Futurología, leído en un libro prestado hace muchos años. Mucho más allá del ambiente saturado de psicotrópicos que impregna la trama de esa novela, estaba ese cuestionamiento de lo que es la realidad. Me encantó su desquiciante locura... y recuerdo ese libro con especial cariño a pesar de la niebla de un montón de años. Fue la primera obra de Lem que leí y tal vez una parte de la magia reside allí.
Luego seguí con La investigación, esta vez comprada a un precio que actualmente da risa. Básicamente una novela policial con elementos fantásticos que la definen como un producto extraño, misterioso. Luego leí sin pena ni gloria Memorias encontradas en una bañera, me pareció lenta y pesada. Por último, el año pasado le tocó el turno a La fiebre del Heno, una novela que sigue una estructura similar a la de La investigación. Quizás Lem trató de ir más allá de lo que había experimentado en La investigación, pero a mi juicio le salió el tiro por la culata. El final, las explicaciones al estilo Ágata Christie o de un Isaac Asimov en El Sol desnudo o Las bóvedas de acero, no le sienta nada bien a Lem. Lo de Lem es la ambigüedad o la sátira, o ambas.
Todavía tengo un volumen antiguo de Lem en mi biblioteca, no lo he leído porque es la segunda parte de Los viajes y memorias... me han dicho que no importa, que no es necesario leer el primero para disfrutar el segundo, pero soy un obsesivo sin remedio. Sin embargo, tal vez ahora le dé una oportunidad.

22 de marzo de 2006

QEPD

Alé limón, alé limón el puente se ha caído
Alé limón, alé limón mandalo a componer
Alé limón, alé limón ¿con qué dinero?
Alé limón, alé limón con cáscaras de huevo

Viaducto 1 (1953 - 2006)

20 de marzo de 2006

Antología en chino

Hace poco Jorge Gómez colocó en su blog, JorgeLetralia, la información sobre una antología que editará la embajada venezolana en China sobre la nueva narrativa venezolana. La selección de autores y relatos será realizada por el propio Jorge Gómez (quien tiene más que experiencia en esas faenas en muchos años al frente de sus tareas editoriales en Letralia). Los detalles de la convocatoria, así como los requerimientos necesarios para colaborar con la antología los encontrarán en el blog de Jorge.
Los cuentos traducidos al chino serán una posibilidad excepcional y probablemente irrepetible de ver las palabras que el autor concibe en castellano vertidas a ideogramas, quizás sin la menor idea de dónde ha quedado aquella imagen única o qué intensidad tiene la mejor escena del cuento leído ahora en la forma de palitos y rayitas. Bueno no es para tanto, para aquellos quienes no posean dominio sobre el antiguo arte de leer en chino habrá una edicion en español. Lo malo es que pierde toda la magia de lo desconocido.
Una gran oportunidad para los jóvenes autores de tocar costas lejanas.

16 de marzo de 2006

Rebelión en la Granja

En "Tommyknockers", de Stephen King, el protagonista al ver a los nuevos seres que evolucionaban en su pueblo por influencia de una enorme nave extraterrestre, recordó el célebre pasaje final de la excelente sátira de Orwell, "Animal farm" (traducida al castellano como "Rebelión en la granja"). Leerlo en el libro de King me rememoró esa misma frase final de la obra de Orwell y me indujo a pensar en analogías, por demás trilladas, al compararlo con el panorama nacional.
En "Rebelión en la granja" los animales se levantan en contra del hombre y su injusta manera de administrar la granja y sus vidas; toman el control de ésta y comienzan a gobernarse a sí mismos con nuevas reglas donde establecen la igualdad entre todos los animales. Pronto el sistema se pervierte a favor de unos pocos. La clase gobernante, los cerdos, resulta favorecida por los cambios, y son ellos quienes al final de la obra se muestran tan despóticos como el anterior amo humano. La novela corta es punzante en su crítica al régimen comunista de Stalin (época en que salió publicada), pero tristemente parece aplicarse a casi todas las revoluciones, pues al parecer las revoluciones dependen más de los hombres que de las ideas.
El pasaje final de "Rebelión en la granja" dice:
"Los animales de afuera miraron del cerdo al hombre, y del hombre al cerdo, y nuevamente del cerdo al hombre; pero ya era imposible discernir quién era quién".
Prefiero pensar en los tommyknockers...

10 de marzo de 2006

Baby Box

En la revista British Medical Journal de febrero salió un artículo donde se estudia la introducción en Italia de las "baby boxes", cajas especiales para que las madres que quieren abandonar a sus bebés lo hagan allí. Las "baby boxes" son aparatos similares a una incubadora neonatal donde las madres pueden colocar a su bebé, accionar un timbre y retirarse (¿escapar?). El timbre le avisa a la enfermera de turno que alguien ha utilizado la "baby box" (como los hornos de microondas cuando terminan el ciclo de calentamiento y hacen "ping"). Al mismo tiempo una señal le notifica al médico y la enfermera del retén, para que todo esté listo para brindarle los cuidados al bebé abandonado.
La idea tampoco es que sea novedosa. La cajitas habían sido utilizadas en la edad media. En Padua, en los orfanatos, se empleaba un rueda circular que contenía una caja en el exterior. Una madre medieval (al igual que las madres modernas) llegaba presurosa y clandestina, depositaba el bultito en la caja, sonaba la campana y huía a toda mecha. Las monjitas dejaban de hacer el pan o callaban las letanías, hacían girar la rueda y veían lo que habían dejado en la canasta. Simple y crudo.
Las "baby boxes" ya se utilizan desde hace más de cinco años en las afueras de los hospitales de Alemania y Hungría. En República Checa no han contado con el apoyo oficial debido a la percepción del ministerio de salud de que el uso de las "baby boxes" aumentaría el número de casos de abandono. Otros países que han implementado la idea son Bélgica, Austria, Eslovaquia y Suiza.
La objeción del ministerio de salud checo suena sensata, pero como con todos los dilemas éticos de nuestra complicada vida hay dos caras de la moneda: En Alemania se comenzó a utilizar el sistema después que se produjeron dos muertes de infantes en 1999, abandonados en recolectores de basura. Aunque la duda (y la decisión) checa pueda parecer políticamente correcta (sobre todo políticamente), tampoco podemos olvidar que los padres no van a dejar de abandonar a sus hijos por el sólo hecho de que no existe un medio seguro para hacerlo. Lo han hecho durante siglos y seguirán "ejerciendo la práctica" llueva, truene o relampaguee. Ahora bien, una pregunta importante es: ¿la "baby box" aumentará el número de abandonos? Para eso está la estadística y no debe ser muy difícil de determinar si hay cambios motivados por el uso de la canasta. Otra pregunta importante (el mudo está lleno de ellas): ¿importa si aumenta el número de abandonos si el uso de la "baby box" salva vidas? Lamentablemente aquí las estadísticas han emprendido la retirada y nos han dejado solos... las muy cobardes. Es como en el caso de repartir preservativos: ¿promueve la promiscuidad o intenta evitar el contagio con el virus del VIH? ¿Dejamos de repartir condones y nos olvidamos de promocionar la práctica del sexo seguro?
Son los casos donde entran en juego la valoración ética y moral de la situación. Aquí es donde el ser humano se enrolla, trastabilla y comete el mayor número de desaciertos.

3 de marzo de 2006

Geraldine

Vagabundeando por la red me encontré con el trabajo del artista francés Arthur de Pins. Buscaba animaciones aficionadas ambientadas en el universo supramegacomercial de Star Wars (no podía ser de otra manera) y como sucede normalmente en Internet me topé con otra cosa. El encuentro fue desconcertante, porque no me lo esperaba después de tantos jedis y siths, pero resultó refrescante. Las ilustraciones de de Pins son muy coloridas y atractivas, una sensualidad curvilínea que se desprende de sus trazos, literalmente. No obstante, como lo que buscaba eran animaciones, las encontré y no quedé insatisfecho. Tiene unas cuantas. Por encima de todas, destacan por su relevancia tres: "Geraldine", "L'Eau de Rose" y "La Révolution des Crabes".
Me encantó sobremanera Geraldine, fresca y divertida, con el ritmo justo para arrancar más de una sonrisa. Si nos guiamos por el criterio del público la mejor debe ser la revolución de los cangrejitos (su estética en trazos simples, blanco y negro, es interesante), sin embargo mi dominio del francés es poco menos que nulo y le perdí el sabor. Además, no siempre las mayorías exhiben un gusto exquisito... más bien tienden a la medianía. En fin, los invito a ver las animaciones en la página del autor: Arthur de Pins. Todo un relax.

1 de marzo de 2006

Necro Once

Acabo de colocar en línea el número 11, correspondiente a Febrero, del Necronomicón. El fanzine está dedicado a la literatura fantástica de corta extensión. La publicación de este número estuvo signada por uno de los males de nuestro tiempo, que yo denomino: el síndrome de la muerte súbita de windows. Afortunadamente nada que con un poco de tiempo, después de la pataleta de rigor, no se pueda solucionar. Al final, el producto endulza las amarguras pretéritas y podemos engañar a la memoria y continuar.
Este número viene con relatos de Jorge Martínez Villaseñor (mexicano), Hernán Domínguez Nimo (argentino) y Adriana Alarco (peruana). Las ilustraciones de Juan Afro (venezolano) contribuyen a darle el tono preciso de horror gráfico que una abominación lovecraftiana que se precie necesita.
Cito el editorial del número 11 y los invito a la lectura completa del Necronomicón en: http://www.geocities.com/ubikcf/necronomicon/necro11/necro11.htm

"Este año comienza tardíamente gracias a un desastre informático que me dejó sin computadora por casi dos semanas. Todavía se pueden saborear trazas de la debacle hasta en el café, un sutil rastro del duendecillo verde que se ocupa de obstaculizar con todas las leyes de Murphy a las que puede echarle mano, las tareas editoriales de UBIK (en cualquiera de sus sabores). Sin embargo, supongo que ustedes podrán degustar el producto final sin tener que preocuparse de lo que sucedió durante su génesis.
Este año, con este número, comienza la segunda decena del Necronomicón. Un año donde espero poder editar, con el apoyo de escritores y lectores, al menos seis nuevos números. Y mientras transcurren esos seis números, confío que pasará el año completo. Un año lleno de historias, tanto en la otra realidad como en las páginas del Necronomicón. Historias fantásticas que esperamos nos permitan soñar o tener pesadillas, que nos diviertan, nos atormenten y sirvan de entretenimiento. Mientras pasa el año, todos los buenos deseos del 31 de diciembre se harán realidad o no se harán. Por mi parte, no creo que ni mi subconsciente deseó la huelga de mi computadora. Un clásico ejemplo de cómo actúa el duende malandrín. Si alguno de ustedes ha observado algún leve indicio de obsesión en el tema de la corrupción de mi PC, puede estar seguro de estar en lo cierto. Y se los advierto, coloquen trampas para ratones o venenos potentes, pero sutiles, a lo mejor tienen suerte y mandan al pequeño demonio al más allá.
Al menos hoy podrán relajarse y leer las historias que nos traen Jorge Martínez, Hernán Domínguez y Adriana Alarco. Desde el Terror a la Ciencia Ficción, libres de malignos duendecillos. Quizás la lectura de esas historias cumplan algunas de sus expectativas de fin de año o no lo hagan en lo absoluto, pero lo seguro es que las disfrutarán hasta el último punto.
Feliz año. Un año de buenos deseos y que el Terror cunda por doquiera".

21 de febrero de 2006

1984

El sábado, camino al Parque del Este (luego sería la tarde de la X Tertulia), observé una valla enorme en la autopista con la fotografía del presidente Hugo Rafael Chávez Frías en uniforme azul de beisbolista con un bordado con la palabra Venezuela cosido a su pecho.
Guante de béisbol, gorra de béisbol, pinta de béisbol.
Encima de la fotografía las enormes palabras: Gracias Señor presidente. Venezuela campeón.
La autoría intelectual corresponde a la gobernación del estado Carabobo.
El bochorno de la mañana le estaba cediendo el paso a unos densos nubarrones oscuros.

15 de febrero de 2006

Banalidad sobre la lectura: libros por año

Siguiendo con mi carácter obsesivo, hago la mención sobre la inmensa cifra de setenta a ochenta libros que Stephen King devora por año. Esos son los momentos cuando me levanto y me miro al espejo: ¿y tú cuántos te lees? ¿Aquello no será un granito o una excrecencia tumoral? ¡Vaya macho, estás de atraco!
Ejem... disculpen la deriva. La respuesta a la primera pregunta, la segunda pregunta y la exclamación narcisista pueden ignorarlas, es francamente minusválida frente aquel exabrupto numérico. Este año sólo llevo 2 libritos (voy por el tercero) y no cuenta para nada un bodrio sobre Bart Simpson que le he arrebatado a mi hija mayor. Ahora ella se burla de mí preguntándome si estoy culturizándome. Yo me volteo, le hago una mueca, y continúo leyendo.
Para no caer en la depresión me excuso con la millonada que deben costar setenta libros y mi franca miseria económica para sufragarme tales gustos. Un cálculo rápido arroja la cifra de dos millones cien mil bolívares con cero céntimos (Bs. 2.100.000,00): Setenta libros a razón de treinta mil bolívares cada uno. Quien los consiga más baratos haga los ajustes pertinentes... de todas maneras, sin querer desilusionarlos, aún es mucha plata.
Yo por mi parte me quedo con mis doce libros al año, leídos en minutos arrebatados a las noches, robados en el baño, en la cocina, en la cama y, gracias a Dios, a mi programa favorito de televisión...

13 de febrero de 2006

Mientras escribo: desenterrando el hueso

Confieso que tenía tiempo sin tener tiempo para dejarme llevar con una historia y en este caso, con la lectura de este libro de Stephen King, tampoco lo tenía. Sin embargo, "Mientras escribo" me ataco cobardemente en mi punto flaco: mi pasión por la literatura. Es que "Mientras escribo" destila amor por la literatura por los cuatro costados y el lomo.
El libro es una especie de compendio de la práctica literaria de Stephen King. Un manual de procedimientos King para la escritura de literatura de ficción. El hombre se faja a desmenuzar su faena de escritor para presentársela como consejos al lector con aspiraciones de narrador. Una de las máximas de King es la sinceridad, no mentir a la hora de fraguar el mundo de fantasía. ¿Un contrasentido? En lo más mínimo, no mentir para King significa rehuir de posturas afectadas. En pocas palabras el autor debe ser auténtico en su literatura o corre el riesgo de no convencer ni a su madre.
Esa sinceridad fue la que compró mi atención durante este fin de semana y no me permitió parar hasta que llegué hasta la página final. Sin embargo, la principal lección que saqué de la lectura no tuvo que ver con valoraciones del tipo verdad o mentira, provino de la noción de King sobre el proceso de estructurar la historia. Stephen King considera que fraguar la historia no es sentarse con una libretita de notas y pensarse hasta el último detalle de la trama. Para él lo básico es la idea y una noción de la trama que permita a los personajes interactuar, luego la historia la contarán ellos solitos. El proceso según King es lo más parecido a una excavación paleontológica: iremos descubriendo la historia a medida que la desenterramos.
Cada escritor tendrá la forma de matar sus pulgas, pero a mí me resultó un alivio constatar que no es necesario escribir un libro antes de sentarse a escribirlo.

9 de febrero de 2006

Mono Gráfico

La revista de Ciencia Ficción española Alfa Eridiani está convocando a todos los escritores venezolanos a enviar sus relatos para la conformación de un volumen monográfico dedicado a la Ciencia Ficción venezolana. La antología será publicada en un Eridano (suplementos especiales que edita el fanzine) a finales del año. La fecha tope para la recepción de las colaboraciones será hasta el mes de septiembre. Se puede solicitar más información escribiendo a alfaeridiani@yahoo.es.
Alfa Eridiani es una revista digital editada en España que se dedica a la difusión del género fantástico, en especial la Ciencia Ficción. Su página web es: http://www.alfaeridiani.com.

Según el editor, José Joaquín Ramos de Francisco: "Las colaboraciones deben tener un marcado carácter especulativo aunque no despreciaré ninguna space opera o cualquier otro subgénero del género que nos ocupa".

A mí, en particular, me gustaría que lográramos constituir una buena antología de relatos, algo así como una instantánea de lo más representativo de la literatura de CF venezolana actual. También debo admitir que es muy probable que la representación sea sesgada a quiénes merodeamos por Internet, por lo que les pido que, si conocen a alguien que escriba CF y no haya tenido acceso a esta información, le comuniquen los términos de la convocatoria.

Una buena representación de los pocos escritores de CF venezolana sería lo mínimo a pedir... Hasta ahora las obras de autores venezolanos están dispersas en Internet, ésta es una oportunidad para reunirlos en un sólo sitio al menos por una vez.