14 de abril de 2006

Siete pequeñas tragedias cotidianas

Accidentes que nos hacen vivir plenamente nuestra realidad corporal:

1. Levantarse una uña del pie con un tropezón.
2. Quemarse los dedos tocando una olla caliente.
3. Escocerse los ojos con una gota extraviada al exprimir un limón.
4. Machucarse los dedos con un martillo al clavar un clavo.
5. Pillarse un pliegue de piel con un alicate.
6. Cortarse con el borde de una hoja.
7. Pincharse con una aguja de coser.

5 comentarios:

Marian dijo...

¡Uy! Quemarse la lengua y que te duela por una semana... :S

Nos seguimos leyendo...

José Antonio Galloso dijo...

agacharse a recoger una pluma y golpearse con la esquina del escritorio.
me acaba de ocurrir
saludos

Anónimo dijo...

Llevarse descalzo la pata de una mesa con el dedo chiquito del pie. Si es a las 2 de la madrugada rumbo al baño mejor.

[Viajero] Milan Banjanin dijo...

...y que me dicen, de "pisarse" algún dedo de la mano (si es el pequeñin, mejor), con la puerta de un armario o auto?
De lo mejor!!!
Saludos Doloronestosos

Jorge De Abreu dijo...

Las infinitas facetas del dolor... ¡y yo queriendo reducirlas a sólo siete!