Ayer los dos Jorges de la casa se sacaron pasaporte: Jorge el no tan viejo (o el no tan joven, dependiendo del punto de vista) y Jorge el joven (Jorge III según la cronología de la casa de los De Abreu). Lo de la solicitud por internet fue un trámite sencillo; sin embargo, me era imposible dejar de sentir desasosiego por lo que podría ocurrir en la otra realidad.
La cita quedó para ayer miércoles 12 de abril a las 10 de la mañana en Los Ruices. Jorge, el no tan viejo, se presentó, con desasosiego y todo, a eso de las nueve de la mañana en la oficina de la Onidex; el Jorge el joven aún dormía el sueño de los justos. Su condición de inocente infante le servía de excusa. Afortunado él por ser menor de edad y exento de las minucias intrascendentes que ocupan a la gente mayor.
Maravilla de maravillas que asombraron los ojos ancianos del jorge no tan viejo. El proceso fue expedito, los funcionarios amables y la alegría mayúscula de este servidor cuando me encontraba de regreso a casa una hora y media más tarde.
Ya en el auto me pellizqué innumerables veces para asegurarme que no estaba soñando. aparentemente no había sueño de por medio porque pegaba un brinco ante cada pellizco, hasta le eché un parado a mi esposa que también se había entusiasmando con lo de la pellizcadera. Ahora la cita es para dentro de un mes para recoger los benditos libritos.
Espero que las segundas partes sean mejores...
1 comentario:
Yo hice mi recuento en 10 min y me lo dieron en 5 días hábiles. Renové mi residencia en 10 min y me la dieron en 8 días hábiles. Sólo pagué los timbres fiscales, que habían. Todo en la ONIDEX de Plaza Caracas. Tampoco me lo podía creer.
Mañana voy a un operativo a renovar mi cédula. Deséame suerte.
Publicar un comentario